Pues de Polonia, a Lituania, Letonia y Estonia, en Estonia estuvimos viviendo una semana mientras pedíamos los visados rusos, todos los días salíamos, hacíamos nuestras gestiones y por la noche dormíamos en el mismo llano junto a un museo, museo naval que terminamos visitando, submarinos, barcos de guerra antiguos, una visita interesante.
Todo el paisaje que nos rodeaba se había tornado definitivamente blanco, ríos lagos y mares, congelados, y como el visado tardaba 15 días, decidimos, ya que estábamos allí, subir a cavo norte. Y para eso, compramos ropa, botas de -30º, visitamos otro taller everspacher con la diferencia de que esta gente si sabían lo que hacían y por fin se arregló la calefacción. También compramos moqueta para el suelo y aislante térmico para las paredes del camión, la diferencia en confort fue considerable, e hicimos acopio de víveres y gasoil como para 2 semanas.
Tras esto, cogimos el ferry que nos llevó a Finlandia, aquí nos paso un episodio un tanto gris, y es que cuando en la oficina nos pregunto que vehiculo era, nosotros le enseñamos los papeles, la mujer entendió que era un Land Rover y pagamos como tal (mismo protocolo que en Marruecos), pero a la hora de subir al barco dijeron que era demasiado grande, que había que pagar el doble, nos negamos, nos devolvieron el dinero, y al día siguiente salimos con otra compañía por poco mas del primer precio que teníamos.
En Finlandia, el ferry te deja en Helsinki, es la única ciudad grande que recuerdo, nada mas llegar nos fuimos a la playa, el mar estaba congelado, pero yo aun tenia dudas de si lo podría pisar sin que el hielo se rompiera, pero al ver a unos 100m a unos chavales que andaban por el hielo sin el menor temor, pues empezamos a caminar sobre este, después resultó que los chavales eran igual de españoles que nosotros solo que, a pesar de todo, con menos luces todavía. Por la noche, en la ciudad, también pudimos ver un bar que se llamaba el Jamón o algo así, tipical spanish, y una churrería, “churros Málaga”, mi ciudad, casi me emociono al verlo, la pena es que estaba cerrada.
Al día siguiente rumbo norte y Km, prácticamente no hay autovías, pero tampoco hay coches, con lo que no se les echa en falta. A mediación del país, volvíamos a estar desesperados por encontrar agua para la ducha, platos etc. Decidimos parar en el único camping que había por la zona, tras entrar en este, pitar, tocar el timbre, caminar por allí sin ver a nadie durante una media hora, decidimos irnos, y ya en la puerta apareció el encargado, nos ofreció de mala gana un bungalow por unos 50€ pero no podíamos llenar agua en ningún sitio, tras esta poco apetitosa oferta, ya que nos volvíamos a ir se nos acercaron 3 chicas de unos 20 años hablando en castellano una de ellas, otra vez emocionado!, nos invitaron a su casa frente al camping, nos dieron agua caliente para los tanques y como agradecimiento les hicimos una tortilla de patatas y cenamos con ellas con algunas cervezas demasiado frías. Una era suiza, otra londinense y la otra mejicana, estaban allí en una especie de voluntariado que consistía en cuidar los 40 perros que tenía el del camping para tirar de trineos y pasear guiris.
En Finlandia también está Laponia y en ella Papa Noel, y ya que se acercaban fechas navideñas, no perdimos la oportunidad de pedirle nuestros regalos.
Llegamos a cavo norte el 22 de diciembre, a estas alturas, y dentro del círculo polar ártico prácticamente no amanecía, de 12 a 15h había un poco de claridad como si estuviera atardeciendo y después mas noche. Pasamos la noche allí, la verdad es que fue una gozada, el parking estaba vacío, con lo que haciendo un poco de 4x4 pudimos pegarnos a la casa del guarda (que estaba deshabitada ) para que el viento no nos zarandeara demasiado, ducha hirviendo, calefacción a tope, rica cena y a dormir. A la mañana siguiente, aprovechamos para hacer fotos con el camión en lugares que seguramente no estaban permitidos, pero con el airazo y el frio que hacía, nadie vino a decirnos nada.
Rumbo al sur, aun en Noruega, se despejó el cielo y pudimos ver el espectáculo de las Auroras Boreales, son una pasada, muy diferentes a las fotos que solemos ver, ya que son muy dinámicas, no paran de cambiar de formas y de colores. Estas las vimos desde un remoto aparcamiento de una remota carretera, decidí justo antes de dormir, que estaría bien acercar mucho el morro del camión a los cuartos de baño (cerrados) que había en el lugar. Como pensaba que tenía un maquinón, al hacer la maniobra, me abrí tratando de que solo las ruedas de un lado pisaran la nieve de fuera del asfalto, tan pronto se salieron unas, se salieron las 4 y por mucho que moví el volante no pude hacer nada para evitarlo, finalmente empacé el S2000 a las 22h de la noche en una carretera perdida de Noruega. Sacamos palas, planchas, acelerones parriba, acelerones pa abajo y tras un rato lo conseguimos sacar y poner a cobijo, pero la historia no termina ahí.
A la mañana siguiente, le tiro a arrancar, y no arranca, probé mil cosas y nada, y tampoco había un alma para pedir ayuda, total, que llamamos a la asistencia en carretera, tardaron un par de horas en dar con nosotros, llega el señor, yo ya tenía los asientos y todo desmontados y cuando le engancho la pinza a la batería me doy cuenta de que uno de las bornes estaba suelto, posiblemente con el traqueteo de la noche anterior. Pues bien, la grua tenia rota la toma de corriente, con lo que tampoco era capaz de “darme teta”, con lo que el plan era arrancarme a la racha enganchado a la grua, pero cuando voy a pisar el embrague este se va abajo sin accionar y no sube, miro al hombre y le digo “don´t worry don´t woorry, one moment please”, Patricia!! Que Esto ya lo hemos hecho antes, tu pedaleas y yo purgo el embrague desde atrás!!, en esos momentos, me daba una pena de mi mismo…. , terminó arrancando.
Pasamos a Suecia, Viva Suecia!!. En Suecia tienen una filosofía distinta al resto de países, mientras que lo típico es quitar la nieve de las carreteras y echar sal para que no cuaje etc., en Suecia todo el mundo en invierno esta obligado a llevar ruedas de clavos y por tanto, nunca quitan la nieve de la carretera Viva Suecia!!, por fin pude pensar eso de, menos mal que me he traído un 4x4. Al igual que en Noruega o Finlandia, todo está bastante desértico por aquellas latitudes, dormíamos en la parte de detrás de alguna gasolinera junto con algunos camiones, o de vez en cuando en algunos aparcamientos públicos desérticos como en el que pasamos la nochebuena, además suelen tener baños públicos, gratuitos, limpios, calientes y con agua caliente (para rellenar nuestros tanques), por aquellos días ya llegamos a los -18ºC con lo que había que dormir con el camión arrancado, fue una gran tentación trasladar la cama a estos baños.
Abandonamos con pena Suecia cogiendo el ferry Holmsund – Vaasa (Finlandia), y de Vaasa a Helsinki, allí una mañana Patricia en solitario cogió un barco de ida y vuelta a Tallín (Estonia) para traerse los pasaportes con nuestros visados Rusos, yo mientras me quede en Helsinki pero no me aburrí, compre un bombín de embrague y unos cuantos latiguillos de agua metálicos y pasé el día cambiando el bombín y unos cuantos tubos del agua de la caravana que se habían roto por congelación. Por la noche nos encontramos, al día siguiente Russia!!